Texto: Alberto Martín, Fotografía: Francisco Rivas - 16 oct 2023 13:36 CET

La jornada ha sido inaugurada por el director de la Cátedra Extraordinaria sobre Juego Responsable y su Comunicación, el catedrático Ubaldo Cuesta -actual vicerrector de Comunicación de la UCM-, por el vicedecano de Comunicación y Relaciones Institucionales de la Facultad de Ciencias de la Información, Cristóbal Fernández; el director general de Ordenación del Juego, Mikel Arana; el director general de la ONCE, Ángel Sánchez, y el presidente de FEJER, Máximo Enrique Gutiérrez.

El director general de Ordenación del Juego, Mikel Arana, ha recordado que los trastornos vinculados al juego en España son muy numerosos, pero, sobre todo, son especialmente preocupantes entre los jóvenes, quienes son el sector que más se incorpora cada año al mundo del juego, siendo ya mayoría en juego on line. También, como señaló Arana, los jóvenes son los más afectados en la actualidad por trastornos graves vinculados al juego, ya que está demostrado que el inicio precoz aumenta la gravedad de los mismos. Según indicó el director general de Ordenación del Juego, el Real Decreto de Comunicaciones Comerciales, en vigor desde hace año y medio, era por esta razón de “absoluta” necesidad y, como ya se está pudiendo comprobar ha conseguido disminuir la presencia de la publicidad vinculada al juego hasta niveles “más limitados y razonables”.

FEJER, como señaló su presidente, Máximo Enrique Gutiérrez, lleva ya tiempo advirtiendo del crecimiento de la ludopatía entre los jóvenes e incluso entre los menores de edad. En especial ante la entrada de estos últimos en este mundo hay que tener “tolerancia cero”. De acuerdo con Gutiérrez es un problema que no se puede negar y pese a las estadísticas que lo minimizan, hay que tomárselo muy en serio. “Sabemos que juegan. Negar la evidencia no es una buena opción”, afirmó el presidente de FEJAR, para quien es necesario tener cuanto antes una reunión entre todas las partes “para ver cómo juegan y ver cómo lograr que no lo hagan”. En este sentido, alertó también de la necesidad de elaborar cuanto antes un plan de prevención “serio” a nivel nacional, que sirva para dar efectividad a los muchos planes que se ponen en marcha desde las distintas administraciones pero que no tienen en cuenta los resultados de las investigaciones y experiencias que se ponen en común en jornadas como la que se celebra este 16 de octubre en la Complutense.

El director general de la ONCE, Ángel Sánchez, explicó que la colaboración que mantienen desde hace años con FEJAR “no es cómoda pero sí muy necesaria”. Como señaló la ONCE se sirve del juego desde 1939 para financiar sus proyectos sociales tanto para las personas con discapacidad visual como para los de otras muchas discapacidades. Dado que “el fin no justifica los medios” la ONCE, según explicó su director general, busca en su alianza con FEJAR “minimizar” el riesgo de sus clientes “o colaboradores, como nos gusta llamarlos” a sufrir comportamientos desordenados”. Por ello, según indicó, todas las fases de sus juegos -emisión, venta, premios…- son filtradas por FEJAR. Sánchez explicó también que la creación con la UCM de esta cátedra extraordinaria dedicada a la comunicación del juego responsable complementa esta intención de la ONCE “de no fallar a la sociedad”. “Entre todos -concluyó Ángel Sánchez- debemos lograr un mundo en el que el juego no sea un peligro de crear comportamientos desordenados”.

La jornada, como señaló el director técnico de FEJAR, Juan Lamas, ha querido prestar especial atención a lo que se está haciendo en otros países en materia tanto de prevención como de comunicación. Para ello, se ha invitado a expertos de tres países: Marina Yiannikouri, de Chipre; Bjorn Helge Hoffman, de Noruega, y Bernard Ruh, de Finlandia. La conferencia inaugural ha sido impartida por Mar Romera, especialista en inteligencia emocional e innovación. El director de la Cátedra y vicerrector de Comunicación de la UCM, Ubaldo Cuesta, ha completado el panel de conferenciantes, con una ponencia sobre “Nuevas maneras de comunicarse entre tribus juveniles”.