LIBROS

El Encuentro se celebró en la Sala de Juntas del Rectorado

Las editoriales universitarias madrileñas debaten en la Complutense sus actuales desafíos

Fotografía: J. de Miguel - 31 mar 2022 10:39 CET

El 31 de marzo se ha celebrado en la Sala de Juntas del Rectorado de la UCM el “I Encuentro de Editoriales Universitarias de la Comunidad de Madrid: retos y oportunidades en el mundo actual”. La presidenta de la Unión de Editoriales Universitarias Españolas, María Isabel Cabrera García, fue la encargada de abrir la jornada con una ponencia en la que abordó los principales desafíos a los que se enfrenta en la actualidad la edición universitaria. El encuentro ha sido organizado por Ediciones Complutense y el Vicerrectorado de Cultura, Deporte y Extensión Universitaria de la UCM, en colaboración con la Asociación de Editores de Madrid.

 

María Isabel Cabrera describió el entorno cambiante en el que se mueve la edición universitaria. De dedicarse básicamente a dar salida a la producción científica de cada universidad, las editoriales universitarias juegan cada vez un papel más trascendente en un ámbito internacionalizado, en el que profesores e investigadores buscan impactos y proyección. “Ahora somos un sector competitivo, aplicamos controles rigurosos de calidad, buscamos coherencia y solidez de nuestros catálogos y estamos abiertos a autores externos”, describió la presidenta de la Unión de Editoriales Universitarias Españolas. No obstante, como reconoció Cabrera, la producción de las editoriales universitarias continúa siendo muy especializada y dirigida, en su mayor parte, a un sector restringido de público, sobre todo formado por investigadores y docentes. En muchas ocasiones, incluso, se publican obras, que por pertenecer a áreas minoritarias, difícilmente verían la luz en otra editorial. Frente a este carácter prácticamente de servicio público, también es cierto que las editoriales buscan aumentar sus ingresos y acercarse a un público más generalista a través de obras más divulgativas, que poco a poco van encontrando un hueco en sus catálogos.   

 

Si las editoriales se están teniendo que adaptar a las necesidades de sus universidades y sus investigadores, también lo están teniendo que hacer a la “revolución digital”, que afecta tanto a los procesos de creación como de su consumo. Según señaló Cabrera, la pandemia ha favorecido el uso de las obras digitales y, de hecho, cada vez son más las obras que solo se publican en soporte digital. Las editoriales universitarias han entrado en el mercado digital juntas a través de la plataforma Unebook, que está permitiendo que desde cualquier lugar del mundo se conozcan los catálogos universitarios, se descarguen las obras o se soliciten en papel. Según informó la presidenta, “las últimas cifras hablan de unos 80.000 títulos en papel y más de 12.000 digitales. La colección de intercambio ha recibido más de 1.280.000 visitas en 2021, y siguen incorporándose editoriales latinoamericanas y privadas; ya somos más de 200 editoriales”.

 

De la mano de la edición digital viene uno de los grandes retos a los que se enfrentan las editoriales no solo universitarias, sino en general de contenido académico: el acceso en abierto a las publicaciones. La Unión Europea está legislando para que el contenido científico se publique en abierto, y ahí “el papel de las editoriales universitarias va a ser clave”, afirmó Cabrera, quien señaló como líneas a respetar tanto los derechos de autores y editores, como la calidad editorial de las obras. Otros retos que las editoriales universitarias tienen que afrontar en estos momentos son, según enumeró María Isabel Cabrera, la defensa del multilingüismo y, en especial del español, frente al empuje del inglés en la comunicación científica; la ya señalada innovación tecnológica, y la necesidad de ganar mercado para asegurar a su vez su sostenibilidad económica. De acuerdo con Cabrera, la calidad debe ser un elemento diferencial de las editoriales universitarias e iniciativas como la puesta en marcha del Sello de Calidad en Edición Académica (CEA-APQ) están contribuyendo a que así sea.

 

Para concluir, la presidenta de la Unión de Editoriales Universitarias Españolas mostró su preocupación por la pérdida de peso que está teniendo el libro en la divulgación de la ciencia y, en especial, en áreas hasta hace poco reservadas para ello, como las humanidades o buena parte de las ciencias sociales. El actual sistema de reconocimiento de la investigación medido por los impactos de los artículos en revistas especializadas, está haciendo caer los libros en el olvido. “Determinadas investigaciones y temas necesitan el desarrollo de un libro, que requiere un esfuerzo muy importante e inversión de tiempo por parte del autor y del editor, que deben ser reconocidos. Si no se reconoce ese trabajo, se perderán los libros y un modelo de comunicación de la ciencia que está en el ADN de las universidades”, alertó Cabrera

 

Tras la ponencia de María Isabel Cabrera, intervino Jerónimo Hernández Casares, coordinador de la Comisión de Editores de Libro Científico, Técnico y Académico (CECTA) de la Asociación de Editores de Madrid. El encuentro se cerró con una mesa redonda en la que participaron los responsables de todas las editoriales universitarias madrileñas, tanto públicas como privadas: María Boyer Lagos, de UPM Press; Isaac Caselles Jiménez, de la Editorial Universidad Francisco de Vitoria; Laura Cruz Parra, del Servicio de Publicaciones de la Universidad Rey Juan Carlos; Arancha de las Heras García, de la Editorial CEF; Saúl Martínez Bermejo, del Servicio de Publicaciones de la Universidad Autónoma de Madrid; Belén Recio Godoy, del Servicio de Publicaciones de la Universidad Pontificia Comillas; Ana Rodríguez de Agüero y Delgado, de CEU Ediciones; Manuel Joaquín Salamanca López, de Ediciones Complutense; Pedro Sánchez-Prieto Borja, de la Editorial Universidad de Alcalá, y María del Carmen Sicilia Fernández-Shaw, de la Editorial UNED.