CINE

Fotograma de "Belfast"

"Belfast", de Kenneth Branagh

Texto: Jaime Fernández - 21 feb 2022 12:07 CET

Año 1969. Belfast, capital del Ulster. Un niño, de apodo Buddy, ve cómo toda su vida, centrada fundamentalmente en su colegio y en una calle de la ciudad, cambia de repente por los violentos enfrentamientos entre católicos y protestantes, que provocarán un conflicto que lleve al exilio a gran parte de norirlandeses.

 

Kenneth Branagh dirige y escribe esta película en la que vuelve a hacer un ejercicio de egocentrismo, centrando la historia principal en sí mismo, esta vez en su propia infancia. A pesar de eso, esta vez el ego no molesta en absoluto y la historia, tal y como la cuenta Branagh es una oda de amor a la infancia, a los tiempos en los que se jugaba en la calle, y en los que la realidad era en blanco y negro y el color lo aportaba el teatro y, sobre todo, el cine. De esa manera, Branagh escribe una preciosa apología de un mundo tan nostálgico como terrible.

 

Por supuesto, entre las verdades histórico-políticas que nos narra el guion también incluye algunas “mentirijillas” como el imposible duelo que gana su padre, emulando al de Solo ante el peligro; el momento musical que se marcan sus padres en el velatorio del abuelo; y, por supuesto, la belleza de esa madre y ese padre, que es más que probable que no se corresponda con la realidad. Eso sí, al menos no reinventa toda su infancia, trasladando su vida a otros lares como hizo Almodóvar en esa cinta tan falsa como pretenciosa titulada Dolor y gloria.

 

La película tiene una factura perfecta, y se nota que Branagh lleva mucho tiempo rodando películas y que además ha hecho mucho cine espectáculo en Estados Unidos, lo que le permite compaginar el cine de autor con el cine de entretenimiento. De ese modo, lo mismo estamos en un diálogo tierno entre abuelillos, rodado de manera íntima, como en una pelea callejera, con coches explotando y cientos de irlandeses reventando supermercados, rodado al más puro estilo Hollywood.

 

Para el reparto, Branagh ha encontrado a Jude Hill, un niño que sorprende por su naturalidad (y probablemente espontaneidad); y ha contado con la dublinesa Caitriona Balfe (Outlander) para el papel de madre y con el oriundo de Belfast, Jamie Dornan (Cincuenta sombras de Grey) para el papel de madre. Los tres están perfectos y además arropados por dos grandes del cine como Judi Dench y Ciarán Hinds.

 

El filme tiene siete nominaciones a los Oscar y es probable que le caigan algunos de ellos. Y merecidamente.