ÁGORA
La Complutense diagnostica el estado de la conciencia social en España
Texto: T. C. - 30 may 2024 11:24 CET
La Facultad de Ciencias de la Información ha sido la sede elegida para presentar el informe “Diagnóstico de la conciencia social en España”, elaborado por un equipo de investigadores de la Facultad, capitaneado por los profesores Cristóbal Fernández Muñoz, Elisa Brey y David Álvarez, y la consultora Torres & Carrera dentro del proyecto de investigación “Conciencia, reputación y liderazgo”, en lo que supone “una línea de trabajo encaminada a determinar qué grado de conciencia tiene la sociedad española a partir de las preocupaciones globales, considerando comportamientos poco morales y referentes éticos”.
Según dicho trabajo, ocho de cada diez españoles afirman que se sienten muy preocupados por lo que ocurre en el mundo, y si lo que más preocupa es el binomio crispación política-conflictos bélicos, en un segundo plano, aparecen a bastante distancia, dos temas como la desigualdad económica y el cambio climático.
A la hora de considerar cuál es la causa de algunos comportamientos pocos morales, casi el 50% de los encuestados afirma estar muy de acuerdo con que la tecnología es cómplice en el deterioro de nuestra conciencia social.
En el informe se indica que a la hora de evaluar nuestra capacidad para discernir lo que está bien y lo que está mal tenemos peor opinión de la sociedad en general que de nosotros mismos a título particular. En opinión de los encuestados, ocho de cada diez afirman que la sociedad no tiene clara la diferencia entre el bien y el mal, mientras que el 75% de los encuestados aseguran que ello sí aplican la diferenciación entre el bien y el mal en la vida cotidiana.
Por grupos de edad, el colectivo que parece más sensible con lo que sucede a su alrededor y el impacto que genera en la conciencia social son los jóvenes nacidos entre 1981 y 1993, los conocidos como Millenials, y le siguen el grupo de entrevistados nacidos entre 1949-1968, los Baby Boomers. En sentido contrario, el colectivo menos preocupado por lo que se está registrando a su alrededor es el de los denominados Z, que son los nacidos entre 1994 y 2010. El grado de preocupación de este segmento es el más bajo de todos los consultados.
El estudio también explora la relación existente entre el estado de la conciencia social y la presencia, o ausencia, de liderazgos de referencia. El retorno de los encuestados refleja lo huérfana que está nuestra sociedad en el ámbito de los liderazgos considerados tradicionales, ya que los colectivos peor valorados son, por este orden, políticos, empresarios y periodistas con un 1%. Por el contrario, los mejor valorados son los voluntarios de las ONG (32%), los ciudadanos de a pie (24%) y, un poco por detrás, los profesores y el entorno educativo (19%). Entre medias, pero ubicados en el suspenso ético, la muestra señala a militares y policías (10%), jueces (7%) y personas vinculadas a la religión (5%).