Texto: Jaime Fernández - 30 nov 2020 12:49 CET

Y eso se hace con tres objetivos fundamentales. El primero de elloses visibilizar el conjunto de actividades y programas que se llevan a cabo desde Compluemprende a lo largo de todo el año. El segundo es ofrecer apoyo y acompañamiento a todos los participantes, con información de los recursos con los que cuentan, tanto dentro de nuestra universidad como fuera, para darles a conocer el ecosistema emprendedor. El tercer objetivo es animar a los diferentes colectivos, tanto a estudiantes como profesores y PAS, a plantearse la innovación y emprendimiento como una opción, no sólo para desarrollar su propia empresa, sino también para desarrollar habilidades emprendedoras que aplicar dentro de la propia universidad o en otras empresas”.

Concepción García Gómez considera que “vivimos un momento histórico por la gran cantidad de cambios y por su velocidad, lo que produce grandes oportunidades”. Por eso, y de acuerdo con el rector Joaquín Goyache, era “una obligación que se celebrase esta Jornada, lo que demuestra, una vez más, la flexibilidad de la UCM para adaptarse a esta situación tan difícil provocada por la pandemia, y eso a pesar de no contar con los medios adecuados para dar incluso una mejor respuesta”.

De acuerdo con el rector, “los emprendedores y las emprendedoras han sido, y son, fundamentales en la economía de nuestro país y de nuestra región. Y cada vez más lo está siendo la universidad, porque para la anunciada reconstrucción y deseada recuperación de nuestro tejido productivo y social la universidad tiene que cumplir un papel fundamental”. A ello añade la vicerrectora que “las universidades no pueden ser ajenas al fenómeno del emprendimiento, sino que deben liderar el impulso y las iniciativas emprendedoras”.

Informa García Gómez de que todavía la edad media de los emprendedores en España es elevada, con más hombres que mujeres, y es tarea de las universidades reducir la brecha de género y la media de edad. Eso se puede hacer, de acuerdo con ella, “ayudando a vencer las barreras iniciales, para que los jóvenes se planteen el emprendimiento como una salida profesional, pero también facilitando el camino, poniendo a disposición de los emprendedores espacios, acercándolos al conocimiento de diferentes vías de financiación, acompañándoles para la puesta en marcha de sus proyectos y su consolidación posterior”. Coincide el rector Joaquín Goyache en que “para el emprendimiento no hay edad, así que esta Jornada no está dirigida sólo a los jóvenes, sino que está dirigida a los que sean más maduros, y teniendo en cuenta que no hay categorías dentro de todos los miembros de la comunidad universitaria”.

Por detrás de Europa

Jesús Nuño de la Rosa, presidente del Consejo Social, reconoce que España está en una posición muy atrasada, por debajo de la Unión Europea, ya que, en cuanto a población ocupada “sólo dedicamos el 0,73% a la investigación, muy inferior al promedio europeo, por debajo de países como Portugal, Grecia y Estonia”. Reconoce Nuño de la Rosa que “llama la atención la baja cifra de inversión, tanto por organismos públicos como privados, sobre todo porque España no ha recuperado los niveles precrisis de inversión pública en I+D, que entre 2010 y 2018 cayó hasta un 10%, mientras que la financiación privada creció sólo un 1,9%”. En contraposición, un país como Alemania, por ejemplo, ha aumentado un 32% la inversión pública y el 40% en recursos privados. Por si fuera poco, “tampoco está España ni a mitad de camino en patentes solicitadas y, ni de lejos, a nivel medio europeo en gastos en educación, que es la palanca clave para el progreso”.

Por todo ello, Nuño de la Rosa considera que “proyectos como Compluemprende son tan importantes, porque proporcionan a los estudiantes y profesores información sobre los recursos para emprender a través del ecosistema de emprendimiento universitario”. Asevera además que desde el Consejo Social creen “absolutamente necesario unir la universidad, la administración y la empresa, que apuesten conjuntamente por el desarrollo y el progreso social”.

Matías Rodríguez Inciarte, presidente de Santander Universidades y Universia, patrocinador de esta Jornada, reconoce que el emprendimiento es un factor fundamental de la formación porque “la dimensión emprendedora es clave en tiempos tan cambiantes. No se sabe qué puestos de trabajo serán demandados dentro de diez años, así que la capacidad de adaptación, de creación, es algo extraordinariamente importante”.

Coincide con el presidente del Consejo Social en que “hay que aportar más recursos a la universidad, porque está infra financiada y esa es una debilidad estructural de toda la universidad española”. Cree que programas europeos tan en boga como el Next Generation, de recuperación de Europa tras la pandemia, son una gran oportunidad que debe utilizar la universidad para desarrollar su misión.

Recordó Rodríguez Inciarte que Santander Universidades ha desarrollado una de sus dimensiones de actuación en torno al eje del emprendimiento, sustentado en las “tres es”: Educación, Empleabilidad y Emprendimiento. Como prueba de esa colaboración con el ámbito universitario, especialmente con la UCM, enumeró una serie de iniciativas como los Premios Emprendimiento Santander UCM, los programas Santander Explorer UCM, el nuevo Centro de Emprendimiento en el campus de Moncloa y “unas fórmulas muy novedosas como los espacios dedicados al emprendimiento de los Work Café, creados para que se barajen ideas, se discutan proyectos y que eso fomente en el ámbito de la universidad una capacidad generadora de ideas fecunda y útil para el futuro”.

Presupuestos generales

José Manuel Pingarrón, secretario general de Universidades, recuerda que esta iniciativa de las jornadas de emprendimiento se puso en marcha cuando él era vicerrector de Transferencia del Conocimiento y Emprendimiento en la UCM, y tiene claro que gracias a ellas se establecen contactos muy útiles para un futuro emprendedor.

Informa Pingarrón de que la semana pasada actuó como representante del ministerio de Universidades en el Consejo de Política Científica, Tecnológica e Innovación, donde el ministro de Ciencia dio unas cifras que tienen que ver con el pacto que se está firmando y según el cual “se prevé que en 2024 la inversión pública llegue al 0,79% del PIB y en 2030, un 1,25%, lo cual puede hacer de elemento tractor para que la I+D+I privada haga que España se sitúe en unas cotas de inversión que tengan que ver con su situación real en el contexto europeo y mundial de la ciencia y la innovación”.

Además, en los presupuestos generales que se debaten ahora en el Parlamento, hay dos partidas relacionadas con este emprendimiento y que tienen que ver con la estrategia de digitalización del sistema universitario español y con la recualificación del profesorado universitario y de los jóvenes doctores. Se quiere, de acuerdo con Pingarrón, “hacer de las universidades un polo fundamental del emprendimiento, basado en la innovación y en la investigación, y por tanto en el conocimiento”.

Un ejemplo de superación

La vicerrectora García Gómez explica que en esta Jornada se pueden conocer de primera mano algunas experiencias emprendedoras, muchas de ellas iniciadas dentro de la universidad y anima a “disfrutar, a no ponerse límites, a desarrollar la creatividad, a hacer crecer el talento”.

La primera de esas experiencias compartidas ha sido la de Aitor Francesena “Gallo”, campeón del mundo de surf adaptado, quien impartió la charla inaugural de la Jornada, “encantado de hablar con la gente joven que es la que está sufriendo más”, y con la idea de ofrecerles motivaciones. Cuenta Gallo que “actitud y trabajo” son las dos palabras que le han movido a él en su vida, desde que nació en un caserío de Guipúzcoa con un glaucoma congénito que le iba a dejar ciego en algún momento, algo que ocurrió hace ya unos años.

El conferenciante fue repasando su vida, como fabricante de tablas de surf, entrenador y surfista, y explicó que cada vez que ha tenido una idea ha “disfrutado mucho dándole forma, y no ha habido nadie que haya conseguido parar esos proyectos”. Explica a los emprendedores que “en lo que más hay que invertir y disfrutar es con la primera idea, ver la salida que puede tener y si compensa, si se ve que es factible, hay que pensar que en el camino siempre habrá quien ponga trabas diciendo que las cosas son imposibles, pero ahí es donde cada uno debe tener claro que nadie debe minanors. No nos puede parar ni el tiempo, porque cuando uno está metido en un proyecto, pasan las horas tan rápido que vuela, ni suena el tictac de un reloj”.

En toda su carrera, Francesena se ha basado en el precepto “querer es poder” y no ha dejado de aprender de sus mayores, siempre escuchando a los que sabían más que él, “que lo han dado todo por nuestro bienestar y hay que cuidar ese pasado”. Reconoce que, a lo largo de vida, cuando no tenía objetivos, se aburría, así que se marcaba alguno nuevo, siempre real. Para llevarlo adelante se ha basado en el sacrificio, porque “sin trabajo no hay nada”; la superación, porque “ya que estás no cuesta nada hacerlo bien”, y la satisfacción, que se consigue muchas veces, “cuando todos esos que no han creído en ti te felicitan por el trabajo realizado”.

Jesús García de Madariaga, director de la preincubadora de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, ha definido a Francesena como “un ejemplo de superación y de pasión, algo que logra contagiar y transmitir a todos los que le escuchan”.

Hackathon

La vicerrectora de Empleabilidad y Emprendimiento, explica que se ha aprovechado el aprendizaje de los meses para enriquecer esta jornada con el I Hackathon #STARTUPUCM, que se ha llevado a cabo en el fin de semana, en el que se han inscrito más de 200 estudiantes, se han creado más de treinta equipos multidisciplinares y han estado trabajando acompañados de técnicos y mentores. En la tarde del día 30 se celebra la final del hackathon y la entrega de premios, que consistirán en la participación en el programa Incuba UCM dentro del Centro de Emprendimiento Santander, así como tres premios de 1.000 euros para apoyarlos.

Asegura el rector Joaquín Goyache que en este hackathon se ha juntado “mucho talento multidisciplinar, característica que remarca el emprendimiento, y no hay un mejor sitio para ello que una universidad que abarca tantas áreas, y de manera tan transversal, como la Complutense”.