DOCENCIA
La Complutense reconoce el esfuerzo de sus 145 docentes excelentes del curso 2021/22
Fotografía: Francisco Rivas - 2 mar 2023 10:35 CET
Ciento cuarenta y cinco profesoras y profesores, que cerraron su ciclo de seis años de evaluación docente en el curso 2021/22, obtuvieron calificación “Excelente”. Como ya es tradición, su Universidad, la Complutense, a través del Vicerrectorado de Calidad, ha querido reconocer su trabajo y compromiso en un acto, celebrado este 1 de marzo en el Paraninfo Histórico de San Bernardo. “Este es un momento de disfrute en el que la Universidad quiere reconocer vuestro esfuerzo, previamente reconocido por vuestros estudiantes, que, a la postre, es a quien nos debemos y para los que trabajamos cada día”, señaló el vicerrector de Calidad, Miguel Ángel Sastre.
Para ser evaluados como “excelentes”, los 145 docentes han tenido que obtener esta calificación en dos evaluaciones de tres años, en las que su trabajo ha sido evaluado por sus estudiantes, por las autoridades de su Departamento y Facultad y por ellos mismos, además de haber acumulado otra serie de méritos docentes. Como recordó el vicerrector Miguel Ángel Sastre, el modelo de evaluación Docentia UCM –que recientemente ha obtenido la certificación de la Fundación Madri+d para el Conocimiento y de la ANECA- es el que más profesores evalúa y el que mayor número de encuestas genera de todas las universidades españolas. Según informó el vicerrector, del curso 17/18 al 20/21, en tres años, Docentia UCM pasó de evaluar a 1.100 profesores a hacerlo a 1.500; y contando también a quienes solo han sido evaluados en las encuestas, de 3.100 a 5.000 profesores, incrementándose a casi 5.300 en el 21/22. La participación del alumnado también ha crecido: en el curso 19/20 fueron respondidas 367.000 encuestas, frente a las 158.000 del curso anterior; es decir se recibieron más del doble de respuestas.
Para alcanzar estas cifras y, sobre todo, para perfeccionar su funcionamiento, según explicó el profesor Sastre, el Vicerrectorado de Calidad, la Oficina de Calidad y la Oficina de Seguimiento de la Calidad Docente, trabajan de manera constante en su mejora. Una de las máximas preocupaciones fue simplificar su realización por parte de los docentes. Así, por ejemplo, según explicó, se ha conseguido que ya no sea necesario introducir individualmente los méritos docentes alcanzados, sino que el sistema ya recoge gran parte de la información con la que ya cuenta la universidad, como, por ejemplo, los proyectos de innovación docente. También se logrado que de cara a las encuestas cada profesor pueda seleccionar las asignaturas que desea que sean evaluadas cada cuatrimestre. Además, desde este curso, en la aplicación informática se refleja el porcentaje de las actividades que el profesor lleva evaluadas para poder hacer una mejor selección de sus actividades, sabiendo lo que le falta para llegar al 50% necesario o al 65% en el caso de que quiera optar al nivel de excelente.
El vicerrector de Calidad explicó que el modelo presentaba una serie de problemas que se ha tratado de solucionar o, al menos, minorar. Así, por ejemplo, uno de los aspectos que más preocupaban al profesorado era mejorar la tasa de respuesta de las encuestas. Para ello, se decidió desde el curso bajar el porcentaje de encuestas necesarias del 25 al 15 %, traducir las encuestas a inglés para los grupos en lengua inglesa. También se incluyeron como actividades evaluables las salidas de campo, presentes en muchas titulaciones, y se habilitó un procedimiento extraordinario para la evaluación de las prácticas clínicas.
Otra preocupación fue incluir en el proceso de evaluación a algunos colectivos de profesorado que no estaban incluidos. Para los profesores en formación se ha preparado una versión reducida de la evaluación sin incluir los “items” de los que no son responsables. Desde el curso 20/21, se implementó la elaboración de informes con los resultados de las encuestas para aquellos profesores que están participando en el programa, pero todavía no han completado el periodo de 3 años de encuestas válidas. Estos informes son útiles de cara a procesos de promoción o estabilización.
Por último, se decidió ofrecer a los profesores formación en la cumplimentación del propio programa Docentia UCM, ya que se comprobó que en muchos caso sus evaluaciones estaban lastradas al no saber exactamente como realizar algunas fases del proceso, en especial las autoevaluaciones. Se han impartido ya 6 ediciones de un curso de 25 horas, y 4 de otro más reducido, de 10 horas. Cuando concluyan los que actualmente están en curso, habrán pasado por ellos más de 1.500 profesoras y profesores. Además, desde el pasado año se concede un premio económico a la excelencia docente, cuya convocatoria para este curso –a la que los 145 premiados pueden presentarse- se abrirá en los próximos días.
Pese a todos los avances, Sastre reconoció que “no todo está hecho”, y que aún quedan aspectos de mejora, como puede ser incluir las actividades on line o dar mayor flexibilidad a los calendarios de las encuestas para ajustarse mejor a las especificidades de los centros. “La calidad es un trabajo que nunca termina. Igual sucede con el trabajo del profesorado”, concluyó el vicerrector.