NUESTRA GENTE

1foto isabel g. adánez

La profesora Isabel García Adánez, Premio Nacional a la Mejor Traducción 2020

11 nov 2020 19:17 CET

La profesora y directora del Departamento de Filología Alemana y Filología Eslava de la Facultad de Filología de la Universidad Complutense, Isabel García Adánez (Madrid, 1972), ha obtenido el Premio Nacional a la Mejor Traducción 2020, que concede el Ministerio de Cultura, por traer al español Siempre la misma nieve y siempre el mismo tío, de Herta Müller (Rumanía, 1953), Premio Nobel de Literatura 2009. “Me hace muchísima ilusión –. ¿A quién no le hace ilusión un premio así?. Y me hace especial ilusión, además, que sea este libro, porque realmente es un libro al que le tengo mucho cariño y me gusta mucho”, comenta la profesora García Adánez a Tribuna Complutense unas pocas horas después de conocer la resolución del jurado este 11 de noviembre.

 

- ¿Es para usted un libro muy especial, dice?

- Es un libro que me parece que es imprescindible realmente no solo por la parte del lenguaje, sino por la postura política y estética de Herta Muller. Realmente es un libro que espero que gracias a esto se lea más. Merece muchísimo la pena. Y bueno, claro, a mí me hace muchísima ilusión y además ahora que estamos todos como metidos en casa, pues de repente ver que hay mundo fuera de tu casa y de tu Zoom y esto… Es una alegría, un subidón.

 

- ¿Cómo llego hasta Herta Müller?

- Llevo traduciendo profesionalmente desde 2000. Yo para [la Editorial] Siruela traducía desde 2005 otras novelas, sobre todo policiacas, y hacía sobre todo muchos informes de lectura del alemán. No hay tanta gente que lea realmente alemán y era un poco analizar qué funciona en el mercado español, etcétera, etcétera. Entonces, a Herta Müller, que estaban ya todas sus novelas traducidas en Siruela, le dieron el Nobel en 2009 y de repente había que traducir todo el resto de su obra, entre ellos los ensayos, que entonces eran tres, y ahora son cinco, con este, que es el último, Y bueno, yo ya estaba ahí y me lo encargaron. A mí, al no ser los ensayos de Herta Müller obras de moda, es decir al no ir con la rapidez de libros que se acaban de publicar que son más best seller; las traducciones puedo hacerlas a un ritmo más lento, más pausado, más regular, y para mí con mi trabajo a tiempo completo en la universidad es más compatible, porque son textos al final con un calendario de entrega un poco flexible. Es decir, coincide un poco todo. Yo soy una traductora que da clases, aunque me gustan las dos cosas. De la traducción literaria como de la escritura es bastante complicado vivir.

 

- ¿Este premio puede cambiar en algo eso?

- Yo no tengo un volumen al año elevado de libros que traducir; igual traduzco dos o tres, dependiendo un poco del grosor o la dificultad. La verdad es que no tengo tiempo material de traducir muchísimo más. Yo selecciono o acepto encargos y lo siguiente a lo mejor que me ofrecen no lo puedo coger por tiempo o yo misma no hago un proyecto porque sé que no voy a poder ocuparme de él en fecha. En ese sentido yo creo que este Premio no me va a cambiar. Supongo que daré ahora alguna conferencia y ese tipo de cosas. Algo más de vidilla, pero no creo que mucho más.

 

- ¿En los tiempos actuales y más aún los futuros, con el desarrollo de todo tipo de tecnologías, del 5G, etcétera, está amenazada la profesión de traductor?

- Traducir es un campo muy amplio. No es lo mismo el que traduce técnica o, por ejemplo, contratos… Al final ahí casi ya se hacen las cosas con traductor automático y luego las corrigen. En literatura es impensable y en Herta Müller que hace una especie como de prosa poética es impensable del todo. En ese sentido la traducción literaria va un poco aparte.

 

- ¿Cuánto tiempo lleva hacer una buena traducción? ¿qué trabajo hay detrás de una traducción?

- Depende mucho de la época, si la conoces, si conoces al autor… Tampoco hay tanto tiempo de leerte muchas cosas antes por la fechas de entrega y vas un poco trabajando a la par el texto que te han encargado y fuentes que tú vas buscando y te hacen falta consultar. Yo al ser de Filología Alemana hay un terreno que ya tengo ganado. Yo la literatura alemana del XIX y del XX más o menos la conozco, te dice algo el autor, te dicen algo las características… Yo tengo ganado ese tiempo. En el caso de Herta Müller sobre ella tampoco hay tanta biografía. Lo que hay es su propia obra, leer todo lo que hay, lo que ha escrito ella, lo que se ha ido traduciendo. En este caso yo he traducido ya todos sus ensayos. Este es el quinto libro y por tanto hay cosas que yo ya me las conozco. Me conozco el lenguaje, me conozco los recursos. Y ella muchas veces analiza también a su propia poética y en esos ensayos analiza también su obra de creación, entonces claro conociéndolo entiendes enseguida lo que quiere decir porque ya sabes a qué se refiere. El primer libro me costó mucho más a lo mejor que en este algunos aspectos de la biografía, que ya los conocía o sabía dónde buscarlos.

 

- ¿Conoce personalmente a Herta Müller?

- Sí, he coincidido con ella dos veces que ha venido a dar conferencias a España y bueno, yo estaba, me la han presentado, y la he saludado y nada más. No tengo ningún tipo de trato personal. Me impone muchísimo, la admiro profundísimamente y bueno, no me atrevería a molestarla con dudas ni nada por el estilo. Espero que la haya hecho ilusión el Premio. Se lo iban a comunicar esta mañana.

 

- Estudió Filología Alemana en la Complutense, y tras 8 años en Alcalá, desde 2008 cuando volvió como profesora ya no se ha movido más de la Complutense. Además, por lo que veo le interesa la gestión. Fue directora del Centro Superior de Idiomas Modernos (CSIM) de la UCM de 2013 a 2016 y desde ese 2016 dirige el Departamento al que pertenece.

- Sí, yo creo que en la universidad también hay que comprometerse con esta parte y no sé si llamarlo servicio a la comunidad pero creo que es algo que todo el mundo tiene que hacer en algún momento o en otro, en un puesto o en otro. Al final es el espacio en el que trabajas y también hay que ocuparse de esta parte más ingrata de organización. No se me da mal, no es que me apasione, pero bueno… Yo estoy muy comprometida en ese sentido con la Complutense. Es mi casa así que también es normal, al menos así me lo parece a mí.