ÁGORA
Una propuesta de reconstrucción del entorno productivo español
22 oct 2020 09:16 CET
Con independencia de cuál sea la caída que puedan experimentar los indicadores económicos, es evidente que la pandemia del COVID-19 constituye una profunda crisis humana, social y económica. Su gravedad se debe a su intensidad, a haberse producido de manera súbita, y afectar transversalmente a todos los sectores económicos y a todos los países. Nunca antes se había vivido en el mundo una situación similar.
En el pasado, algunos países han sabido hacer en momentos de profundas crisis grandes transformaciones que les han situado en sendas de progreso más avanzado que el previsible antes de la crisis. Ya que sufrimos la desgracia de tan grave pandemia, ojalá sepamos también nosotros encontrar la mejor forma de recuperarnos. En estos momentos difíciles conviene mirar al futuro y diseñar el tipo de país que queremos ser en las próximas décadas. Para ello debemos identificar nuestras fortalezas, que son muchas, y aprovechar al máximo el talento que tenemos, que es abundante, pero no siempre tiene la oportunidad de colaborar al progreso del país.
Con esta intención, constituimos un grupo de trabajo formado por economistas académicos que elaborase una propuesta de líneas de actuación que pudiesen ofrecer las claves para hacer frente a las consecuencias sanitarias y socioeconómicas de la crisis de la COVID-19. Nuestra propuesta permitiría establecer una estrategia global, apoyada en un sistema educativo que garantice la igualdad de oportunidades y con una oferta de titulaciones actualizada, unos mercados eficientes y competitivos, y una Administración Pública eficaz, definitivamente al servicio de todos los ciudadanos. Tal estrategia debería ser el motor de una transformación digital y verde de nuestro modelo productivo, en línea con las directrices de la UE, hacia una economía moderna, más eficiente y con una mayor cohesión social, que alcanzase una senda sostenida de progreso, compatible con la conservación del medio ambiente.
Nuestra pretensión era huir de recomendaciones genéricas y descender a delimitar programas de actuación en ámbitos concretos y con objetivos específicos. El producto final es un documento que se ha beneficiado de las sugerencias, comentarios, apoyo y adhesiones de más de 150 firmantes. Describe programas concretos de inversiones y reformas, agrupados en ocho áreas: 1) Ciencia, innovación y transferencia tecnológica, 2) Energía, recursos naturales, medio ambiente y transporte, 3) Fiscalidad y reforma de la Administración Pública, 4) Sanidad y servicios sociales, 5) Educación, 6) Industria y turismo, 7) Mercado laboral, 8) La economía del mundo rural.
Algunas de ellas suponen un aumento del gasto publico que debería ser contemplado en el marco de un programa de medio y largo plazo que garantice la sostenibilidad de la deuda pública en un contexto de elevado endeudamiento y déficits crecientes del sistema de pensiones. El Fondo de Recuperación Europea/Next Generation EU (Next) y el nuevo Marco Financiero Purianual de la UE permiten ampliar los instrumentos necesarios para acometer tales inversiones, que deberán complementarse con unos presupuestos renovados y con reformas, algunas de ellas en el marco institucional y regulatorio, que avancen al unísono hacia unos objetivos comunes.
Para su desarrollo e implementación se considera necesario crear una oficina técnica profesional que evalúe, gestione y supervise los proyectos, agrupándolos en planes de actuación amplios, de alcance transversal, que permitan aprovechar las complementariedades entre proyectos individuales y conseguir un mayor efecto transformador.
La estrategia global que incorporase nuestras propuestas debería ser, por naturaleza, transversal al ideario político, apoyándose en la materialización de acuerdos entre los partidos políticos, en su papel de representantes de los ciudadanos, con compromiso de cumplimiento al margen de los avatares políticos que puedan ocurrir en el futuro. No puede ser una iniciativa partidista. Puede parecer utópico, pero solo requiere la voluntad política de reconocer que son los ciudadanos, y no sus representantes, quienes deben ser protagonistas del devenir del país.
El documento completo puede consultarse en: www.ucm.es/icae/reconstruccion
Ignacio Conde-Ruiz (Universidad Complutense)
Juan Francisco Jimeno (Universidad de Alcalá)
Alfonso Novales (Universidad Complutense)
Rafael Salas (Universidad Complutense)