ESTUDIANTES

Desde el día siguiente a la invasión, World Central Kitchen está dando comida a los refugiados que salen de Ucrania

Alumnas del máster en Dirección de Fundraising organizan una campaña de crowdfunding de ayuda a Ucrania

Texto: Jaime Fernández, Fotografía: World Central Kitchen - 4 abr 2022 10:27 CET

El 24 de febrero comenzó la invasión de Ucrania por parte de Rusia y un par de días después, durante el fin de semana, las alumnas del máster en Dirección de Captación de Fondos (Fundraising) para ONL (Organizaciones Sin Ánimo de Lucro) de la UCM tuvieron una clase de crowdfunding con Mauricio O’Brien, uno de los fundadores de Goteo.org, una de las plataformas más importantes de este tipo de micromecenazgo. Da la casualidad de que además una de las alumnas, Natalia, es ucraniana y tiene familiares y amigos en su país de origen. A ello se unió que la coordinadora del máster animó a las estudiantes a lanzar una campaña de ayuda y ahí surgió Menús solidarios para Ucrania, que va a enviar el dinero a World Central Kitchen (WCK), la ONG del chef José Andrés.

 

Una de las alumnas del máster, Anna Ramos, es además trabajadora, desde 2002, en la Fundación General de la Universidad Complutense, y nos cuenta que en cuanto Mauricio O’Brien se comprometió a tutorizar la campaña en Goteo.org, se pusieron a trabajar de inmediato, contactando on line con una representante de World Central Kitchen. La idea era conseguir el apoyo de la ONG, con vídeos, imágenes y con “una cuenta bancaria para que el dinero vaya directamente a ellos cuando se termine de recaudar”.

 

Reconoce Ramos que en un principio “fue como tirarse un poco a la piscina”, porque los impactos con los que contaban las alumnas del Máster eran sus redes sociales y sus contactos personales, pero la colaboración de la cátedra de Transformación Social Competitiva, de Conpymes, y el apoyo de la Fundación, difundiendo el proyecto y además donando 1.000 euros, ha servido de aliciente para salir incluso en medios como ABC, en un artículo sobre “el ejército de José Andrés”.

 

Explica Anna Ramos que de todas las opciones que había de ayuda para Ucrania eligieron a esta ONG porque “la comida es fundamental” y además contaban con el testimonio de una amiga de Natalia, que “al pasar la frontera ya se encontraron con los voluntarios de la ONG y cuando les dieron el primer plato de comida les resultó muy gratificante, sentían que no estaba todo perdido, que se iba a poder dar de comer a la familia”. WCK además fue de las primeras en ayudar, y ya el 25 de febrero estaba en la frontera de Polonia, así que “fue una decisión sencilla”. En estos momentos, la ONG distribuye “alimentos nutritivos y comidas recién hechas en toda la región, incluyendo Ucrania, Polonia, Hungría, Moldavia y Rumania, y trabaja con restaurantes locales, empresas de catering y camiones de comida para proporcionar alimentos reconfortantes en los cruces fronterizos, refugios y otros lugares a lo largo del viaje”.

 

El mínimo que se pensaba obtener era de 5.250 euros, pero en la primera ronda y al cierre de este artículo ya habían subido a 8.114 euros, así que ahora van a por el óptimo que serían 10.500 euros. Están además en una primera ronda, que acaba el 24 de abril, a la que luego le seguirá otra de 40 días para llegar a ese óptimo o superarlo. Explica Ramos que al haber pasado ya el mínimo, todo el dinero recaudado va a WCK.