Texto: Jaime Fernández, Fotografía: Instituto Cervantes - 9 mar 2022 09:36 CET

Este 8 de marzo de 2022 el Instituto Cervantes ha celebrado el Día Internacional de la Mujer invitando a nueve mujeres relevantes de la cultura hispana para entregar un legado a la Caja de las Letras, una iniciativa que se mantiene desde 2007 y en la que diferentes personalidades (también hombres) han ido depositando “simbólicos legados como memoria viva de la cultura de España y de los países hispanohablantes”. Las seleccionadas de este año, “verdaderos motores de innovación”, han sido, por orden de participación, la bibliotecaria y lexicógrafa María Moliner (en su representación ha asistido su nieta Genoveva Pitarch); la poeta y novelista nicaragüense Gioconda Belli; la artista multidisciplinar Lita Cabellut; la artista y escultora Cristina Iglesias, recientemente nombrada doctora honoris causa por la UCM; la cantaora Carmen Linares; la escritora colombiana Laura Restrepo; la actriz Aitana Sánchez-Gijón; la periodista y escritora Maruja Torres, y la química complutense María Vallet Regí.

Carmen Noguero, secretaria general del Instituto Cervantes, recordó que casi dos tercios de los analfabetos del mundo siguen siendo mujeres, y también son ellas las que tienen menos acceso a los servicios básicos, las que sufren violencia machista… Sin embargo, reconoce que “hay mucho andado en muy poco tiempo, como demuestran las nueve mujeres que hoy nos acompañan para dejar su legado en la Caja de las Letras”. Señaló Noguero que, de acuerdo con el director del Instituto, Luis García Montero, “un idioma es mucho más que una gramática y un diccionario, es también una memoria, que, como todas, elige lo que recuerda, y esta Caja de las Letras es memoria, y nos recuerda que la verdadera riqueza de una sociedad es su cultura”.

A cada una de las mujeres que han entregado el legado les han acompañado, y presentado, trabajadoras del Instituto Cervantes, que ocupan diferentes puestos de responsabilidad, y en el caso de Vallet ha sido Tíscar Lara, directora de Tecnologías y Contenidos Digitales, quien reconoció que “hoy es imposible hablar de investigación científica en España sin mencionar a María Vallet Regí”. Carmen Noguero añade que Vallet es “una científica, gracias a la cual atisbamos lo que será nuestro futuro”.

La catedrática complutense dio las gracias al Instituto Cervantes, y en especial a su director por “pensar en meter a la ciencia en un acto como este, porque la ciencia también es cultura y es bella y tiene su sitio aquí, y después de la pandemia la sociedad se ha hecho más consciente de lo importante que es la ciencia para que todos podamos vivir, y vivir mejor”.

Para meter en la Caja de las Letras, Vallet ha elegido tres libros escritos en castellano y tres artículos científicos escritos en inglés, trabajos que para ella han tenido un significado especial. Así, ha llevado el primer libro de biomateriales que escribió junto al traumatólogo Luis Manuera, dirigido a médicos y universitarios que quisieran trabajar en el ámbito de la ciencia. Años después publicó un “libro chiquito en biomateriales, para que desde los niños pequeños hasta los adultos pudieran entender qué son esos materiales y los implantes que se ponen en el cuerpo”, y ese ha sido el segundo de sus libros elegidos, mientras que el tercero es una biografía de Marie Curie, para el que ella realizó el prólogo en su segunda edición.

Entre los artículos, publicados en inglés, ha seleccionado un editorial escrito por tres discípulas suyas y su hija, “es decir un editorial escrito por cuatro mujeres y dedicados a otra mujer, así que hoy es un día perfecto para ese editorial”. Un segundo artículo que versa sobre los estudios en los que está centrado ahora, “para vivir mejor, no más tiempo, pero sí bien el tiempo que vivimos”, y el último artículo que es un repaso a lo que se ha conseguido en los últimos veinte años.

Clausuró el acto Nadia Calviño, vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, que mostró su satisfacción por participar en este acto que le ha permitido ver las cajas fuertes de otra manera a las que las ve habitualmente, “mucho menos románticas, mucho menos inspiradoras”. Habló la ministra, en este 8M, de la igualdad de género, que “es un derecho, pero sobre todo una condición necesaria para la prosperidad y el desarrollo, y con eso hablamos de derechos humanos, de justicia, de una sociedad sana, pero también de un crecimiento fuerte, sostenible, justo, próspero y verdaderamente inclusivo”.