CURSOS DE VERANO
RCP de alta calidad, el método que puede salvar a millones de personas
Texto: Jaime Fernández - 13 jul 2021 18:12 CET
En el marco del encuentro “El papel de la farmacia comunitaria en las emergencias sanitarias extrahospitalarias” se ha podido asistir a la simulación de atención da un adulto que ha sufrido una parada cardiorrespiratoria súbita. Carlos de Benito Álvarez, codirector del Programa de Formación Continua de Urgencias y Emergencias Extrahospitalarias de la UCM y vicepresidente de la Asociación Farmacéuticos por la RCP y la Desfibrilación Precoz, explica que la parada cardiorrespiratoria en la principal causa de muerte en el planeta, y gran parte de los casos se podrían evitar si “al menos el 50% de la población estuviese formada en RCP (reanimación cardiopulmonar) y más si es de alta calidad”.
La RCP de alta calidad incluye, aparte de la técnica básica de reanimación, una coordinación entre todos los actores que participan en la misma. Aclara De Benito, que todo es importante, desde la llamada que se hace a los servicios de emergencia hasta la gestión del escenario para que no se entrometa gente que no sabe cómo reaccionar.
En este caso concreto, en el que el propio De Benito simula la parada cardiorrespiratoria, la llamada tiene que indicar que es un varón mayor de cuarenta años, el tiempo que se supone que lleva en el suelo, si ha hecho algún ruido al caer, y el lugar exacto donde se encuentra. Al haber caído de frente, hay que proceder a quitarle la mochila y luego darle la vuelta, procurando que haya una alineación correcta entre espalda, tronco y cuello para evitar posibles lesiones.
Asegura De Benito que las personas inconscientes, e incluso las que están en coma oyen lo que se les dice, así que hay que preguntarle siempre si se le puede ayudar, porque “si no hay respuesta, la ley asume que nos da el consentimiento para hacerlo”.
En el ejemplo, el accidentado (sustituido luego por un maniquí preparado para la RCP) ha tenido mucha suerte porque se ha topado con cuatro socorristas farmacéuticas, María, Irina, Patricia y otra María, que se coordinan perfectamente para que todo salga bien, incluso trayendo un desfibrilador que se encuentra en las instalaciones y oxígeno. Explica el profesor complutense que en este siglo XXI se ha empezado a suministrar oxígeno también porque eso permite mantener viables los órganos, para una recuperación, o en caso contrario para que los órganos sirvan para un trasplante.
El corazón no puede dejar de latir, así que hay que seguir comprimiendo constantemente, con una parada máxima de 4 segundos en los que las socorristas se van turnando para no cansarse y comprimir de manera rítmica y permanente. Lo que ya se ha descartado totalmente es el conocido como “boca a boca” y más desde la existencia de la pandemia de la COVID-19.
La tarea de reanimación dura hasta que el sujeto abre los ojos o hasta que llegan los servicios de emergencia, porque es realmente en el hospital donde termina la historia, pero lo fundamental es que su corazón no se haya detenido mientras se espera a las emergencias. Hay que tener en cuenta que la fibrilación puede durar unos cinco minutos y hasta diez si es con una RCP de calidad.
Anima de nuevo De Benito a que todo el mundo se forme en la RCP y, sobre todo, que lo practiquen, porque “este nivel de coordinación sólo se consigue con una buena práctica”.