CV / ARTES Y HUMANIDADES

Alejandra Gómez Martín, conservadora del Museo de la Farmacia Hispana, realiza una visita guiada en el curso  “Estado de la cuestión de los museos y sus colecciones: Perspectivas de Futuro”

Los grandes museos diseñan estrategias para captar más público, sobre todo entre los jóvenes

Texto: Jaime Fernández, Fotografía: Jesús de Miguel - 10 jul 2025 14:36 CET

Hacer, en una misma semana, visitas exclusivas al Museo del Prado, al Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, a la Galería de las Colecciones Reales, al Museo del Traje, al Museo Cerralbo, al Museo Lázaro Galdiano y al Museo de la Farmacia Hispana de la UCM, es algo que de lo que muy pocas personas pueden presumir. En concreto, pueden hacerlo los cincuenta matriculados en el curso de verano de la UCM “Estado de la cuestión de los museos y sus colecciones: Perspectivas de Futuro”. A todas esas visitas guiadas el curso ha sumado una sesión de conferencias con representantes de todos esos museos, del Ministerio de Cultura y del vicerrectorado de Cultura, Deporte y Extensión Universitaria de la UCM. Todos coinciden en la necesidad de diseñar estrategias que acerquen los museos a los jóvenes.

 

Carmen de la Guerra Martín, directora del curso y presidenta de la Asociación Cultural del Coleccionismo del Arte (ACCA), explica que ya llevan cuatro años organizando en el campus las Jornadas de Coleccionismo UCM-Historia del Arte, y de ahí surgió la idea de hacer un curso de verano.

 

Desde el primer momento se pensó que no fuese sólo un seminario con conferencias, sino que contase con una importante parte práctica que permitiese a los estudiantes visitar los museos acompañados de destacados profesionales. Reconoce De la Guerra Martín que el programa final del curso ha sido posible gracias a la buena disposición de los museos implicados, la colaboración del Museo del Traje, donde se celebró la jornada de conferencias, y, sobre todo, al respaldo económico de la Dirección General de Patrimonio Cultural del Ministerio de Cultura.

 

Asegura la directora del curso que todas las ponencias “fueron brillantes”, y en ellas se presentó el perfil de los visitantes de museos como el Prado o el Reina Sofía. Un perfil que, dejando aparte a los turistas, coincide con una mujer en los cuarenta o los cincuenta años. Por eso, ahora lo que intentan es atraer a las nuevas generaciones, con políticas de precios reducidas o gratuitas, visitas nocturnas o actividades que les enganchen.

 

Los responsables de los museos hablaron también de procesos como la digitalización y las diferentes iniciativas que están llevando cada uno a cabo para ampliar sus públicos, como el Prado Extendido, la creación de las Galerías de las Colecciones Reales, mostrar el valor inmenso de las colecciones y el patrimonio de la Universidad Complutense, replantearse las colecciones del Reina Sofía, potenciar la accesibilidad del Lázaro Galdiano y fomentar la experiencia de visitar el Museo Cerralbo.

 

La directora del curso tiene claro que “a los jóvenes les interesan las experiencias, pero no hay mejor experiencia que visitar los museos de la mano de alguien que te explica las cosas con profesionalidad, porque no es lo mismo ver un museo de manera digital que vivir la experiencia del contacto con las obras y con los que han creado las colecciones”.

 

Cree la directora que el objetivo del curso se ha cumplido con creces y confía en que se convierta en un seminario de referencia en próximas ediciones de los Cursos de Verano de la UCM, porque “la cultura es un patrimonio de todos y en los museos y las colecciones es donde está el patrimonio del pasado, el del presente y el del futuro. Y ese es un tema sobre el que hay que concienciar a la ciudadanía y sobre todo a las nuevas generaciones de estudiantes”.